La Paeria aprueba el nuevo Catálogo de Bienes Protegidos, que amplía el número de elementos a conservar hasta 552
La Junta de Gobierno Local ha dado hoy luz verde inicial al nuevo Plan Especial de Protección del Patrimonio, que incorpora nuevas categorías de bienes a reconocer, como socioculturales-etnológicos, ambientales y naturales
El alcalde Fèlix Larrosa, ha presidido hoy la presentación del documento en la Canonja de la Seu Vella y se ha marcado como objetivo alcanzar una estrategia clara de mantenimiento e inversión en patrimonio, con ayuda de otras administraciones
La Junta de Gobierno Local ha dado hoy luz verde inicial al nuevo Plan Especial de Protección del Patrimonio, que incorpora nuevas categorías de bienes a reconocer, como socioculturales-etnológicos, ambientales y naturales
El alcalde Fèlix Larrosa, ha presidido hoy la presentación del documento en la Canonja de la Seu Vella y se ha marcado como objetivo alcanzar una estrategia clara de mantenimiento e inversión en patrimonio, con ayuda de otras administraciones
La Junta de Gobierno Local ha aprobado hoy inicialmente el nuevo Plan Especial de Protección de Patrimonio y Catálogo de Bienes de Lleida, que amplía el número de elementos protegidos de los 162 incluidos en el planeamiento general de 1999 hasta 552, y mejora su definición, para garantizar su adecuada conservación.
El alcalde de Lleida, Fèlix Larrosa, ha presidido hoy la presentación del nuevo documento en la Canonja de la Seu Vella, en un acto que ha contado con la presencia de personas vinculadas a su elaboración y al mundo de la cultura, urbanismo y el patrimonio de Lleida.
El paer en cap destacó que en la revisión del nuevo POUM que se aprobó inicialmente en 2018 ya se incluía una actualización del catálogo, que entonces no llegó a entrar en vigor. "Estamos en el año 2023 y el gobierno de la ciudad iniciará los trámites para la protección definitiva de nuestro patrimonio, de 552 elementos. Hemos sido excelentes en descubrir, catalogar y sobre todo asegurar que estos bienes que protegemos perdurarán. La vocación es proteger, preservar y poner en valor, y éste es el trabajo del catálogo", ha afirmado Larrosa, quien también ha lamentado la pérdida por falta de protección de elementos históricos como la Escuela de los Ferroviarios y la antigua estación del Pla de Vilanoveta.
Larrosa se ha marcado como objetivo incluir en los presupuestos fondos para avanzar en la recuperación del patrimonio, con ayuda de otras administraciones. "Necesitamos una estrategia clara de mantenimiento e inversión, de planificación y promoción", ha dicho y ha animado a la ciudadanía a presentar sus aportaciones durante el período de información al público.
Por su parte, la primera teniente de alcalde y concejala de Agenda Urbana, Begoña Iglesias, ha agradecido la labor de todos los técnicos implicados en la elaboración del Plan y de las entidades que han colaborado, y ha señalado que éste será “un documento vivo, que puede incorporar más elementos”.
En este sentido, ha destacado que se contará con la colaboración de la federación vecinal, la FAVLL, para difundir su contenido y también porque está recopilando elementos de interés en l'Horta que ahora no están y que se podrán incorporarse. "Con este documento damos relevancia a nuestro patrimonio, a su protección y conservación", ha afirmado.
La jefa de sección de Patrimoni, Anna Oliver, ha explicado el contenido del documento. El Plan establece las medidas urbanísticas de protección jurídica necesarias para preservación de los bienes que, por sus valores singulares o por sus características arquitectónicas, históricas o ambientales sean objeto de especial protección, y regula sus intervenciones para su protección.
Se implementan nuevas categorías de bienes a reconocer, como socioculturales-etnológicos, ambientales, naturales, necesarios para entender la dimensión histórica y de transformación de la ciudad. Se fija el diseño de una ficha única para cualquier tipo de elemento, distinguiendo los distintos niveles de clasificación y protección, estableciéndose un protocolo de intervención también único ante cualquier actuación en un espacio o elemento de protección.
Clasificación de los bienes a proteger
El nuevo documento incorpora cinco tipologías de bienes a reconocer, según su naturaleza y valores asociados.
Son las siguientes:
Arquitectónico
Incluye a los conjuntos arquitectónicos (85 elementos) conformados por elementos o conjuntos con valor cultural, histórico o identitario (restos históricos, ambientes y conjuntos de edificios).
Algunos ejemplos de restos históricos (33) son los conjuntos monumentales de la Seu Vella y Gardeny y las diversas arcadas medievales que perviven en el Centro Histórico; en la categoría de ambientes (31) se incluyen lugares como el recinto antiguo de los Campos Elíseos, el Hospital de Santa María o la plaza San Francisco; mientras que como conjunto de edificios (21) podemos encontrar el conjunto de chalés de la calle La Premsa o el campus universitario de Cappont, entre otros muchos.
Los elementos arquitectónicos (278) los conforman monumentos histórico-artísticos, arquitectura representativa de un momento concreto, fragmentos de edificaciones (como rejas, esgrafiados y portadas), arquitectura popular, etc.
Se incluyen en esta categoría los edificios (232), los elementos singulares (33) y los elementos de ingeniera (13). Como ejemplos de edificios encontramos las iglesias de Sant Martí y Sant Llorenç; como elementos singulares se pueden citar la Fuente de la Costa de Jan o la Creu de los Tres Tombs; y como elementos de ingeniería, el puente de Príncipe de Viana o el ascensor del Canyeret, entre otros.
Arqueológico-Paleontológico
Forman parte de la misma los bienes muebles e inmuebles de carácter histórico (127) situados o procedentes de la superficie o en el subsuelo que pueden servir como instrumentos para el conocimiento de la historia o la cultura, siempre que para obtener este conocimiento sea necesario estudiarlos con metodología arqueológica. Se divide en elementos arqueológicos y paleontológicos (BARP) y áreas de expectativa arqueológica (AEA). Algunos ejemplos son el barrio de la Cuirassa, las curtidurías de la Rambla Ferran, los pozos de hielo o los restos de muralla.
Sociocultural-Etnológico (BSE)
Lo conforman los elementos o lugares de interés sociocultural de la memoria histórica, como formas residenciales, testigos y vestigios de actividades industriales, militares, religiosas, agropecuarias, forestales, pesqueras, o lugares de interés por eventos concretos. Hay 27 y algunos ejemplos son restos vinculados a la Guerra Civil en varios puntos de la ciudad, como los nidos de ametralladoras, refugios, bunkers y fosas o el monumento al Liceu Escolar. Se ha elaborado a partir del partir de trabajo realizado por la UdL con colaboración del Centro Excursionista de Lleida, ha explicado Oliver.
Natural (BN)
Lo conforman lugares y/o elementos puntuales con valor en sí mismos, con independencia de su entorno como son: ríos, rieras, zanjas, torrentes, comunidades vegetales de interés; espacios de interés natural, espacios conectores, y árboles de interés local o monumentales. Se cuentan 17, entre ellos el parque de la Mitjana, el espacio fluvial del Segre o la colina de la Moradilla.
Ambiental-Paísajístico (BAMP)
Lo conforman las áreas cuyo valor es el resultado de la interacción dinámica entre los factores naturales (geología, climatología, hidrología, etc.) y los humanos (actividad económica, asentamientos, etc.). Son 18 elementos y se incluyen, por ejemplo, el Arboretum, el Parque del Vilot de Sucs, Les Basses o los bordillos de los canales.
Categorías de protección
Las categorías de protección se clasifican en cuatro según lo establecido en la ley del Patrimonio Cultural Catalán, que son los Bienes Culturales de Interés Nacional (BCIN), los Bienes Culturales de Interés Local (BCIL), los Espacios de Protección Arqueológica ( EPA) y los Bienes con Protección Urbanística (BPU). También se contemplan tres categorías específicas para los bienes que se protegen por la vía urbanística, que son los Entornos de Protección, los Contornos Urbanísticos de Protección y las Áreas de Expectativa Arqueológica.
Cada bien incorporado en el Catálogo goza de un nivel de protección diferente en función de sus valores. Se prevén cinco niveles: la protección integral (nivel 1), la conservación (nivel 2), parcial (nivel 3), la protección ambiental (nivel 4) y la documental (nivel 5).
Tramitación
El Catálogo de bienes debe formar parte de la documentación del Plan de Ordenación Urbanística Municipal (POUM), pero dada la complejidad de la tramitación del nuevo POUM, se ha optado por impulsarlo en forma de Plan Especial de Protección, tal cómo permite la legislación vigente. Se tiene en cuenta la necesidad y el interés general que tiene para el municipio la redacción de un nuevo Catálogo, que permita actualizar y ampliar el documento vigente, a fin de garantizar la preservación de los valores históricos, arqueológicos, culturales, paisajísticos y los recursos naturales, así como los valores de identidad de Lleida.
Una vez la Junta de Gobierno apruebe inicialmente el documento, se abrirá un período de información pública para que la ciudadanía pueda presentar sus alegaciones y propuestas, antes de la aprobación provisional por parte del pleno y la definitiva por parte de la Comisión Territorial de Urbanismo de la Generalidad.