Lleida inaugura el área de recreo para perros de los Jardines de Francesc Solana, entre el Secà de Sant Pere y Balàfia
Es el quinto parque de estas características con el que cuenta la ciudad
Es el quinto parque de estas características con el que cuenta la ciudad
El Ayuntamiento de Lleida ha inaugurado hoy el área de recreo para perros, situada en los Jardines de Francesc Solana, en la avenida de Torre Vicens, entre los barrios del Secà de Sant Pere y de Balàfia. Es el quinto espacio de estas características con el que cuenta la ciudad junto con los que hay en los Jardines de Maria Mercè Marçal de Cappont, en el Parque de Santa Cecilia del Centro Histórico, en los Jardines Jaume Magre, en el Joc de la Bola-Camp d'Esports, y en los Jardines Primer de Maig, en la Mariola.
El paer en cap, Miquel Pueyo, ha presidido la inauguración acompañado de los tenientes de alcalde Toni Postius y Jordina Freixanet, de los concejales Ignasi Amor y Sergio González y de los presidentes de las AV de Balàfia, Toni Baró, y del Secà de Sant Pere, José Carreiro. El acto ha contado con la participación de un buen número de personas propietarias de perros, los cuales, enseguida, se han hecho suyo el espacio.
El alcalde ha animado a los propietarios/as de animales de compañía a utilizar este parque y les ha alentado a difundir por todas partes el civismo y la responsabilidad con que actúan en el espacio público.
La nueva área de recreo para animales de compañía cuenta con 860 metros cuadrados de superficie e incluye elementos como una fuente y abrevadero, mobiliario urbano, espacio arbolado y un sistema de drenaje para los orines. Se mantienen todos los árboles existentes y el área está señalizada con un cartel que incluye la normativa básica de utilización del espacio.
Estos tipos de parques facilitan una zona donde pasear libremente y con seguridad a los animales sin correa, para permitir que puedan socializar y relacionarse con otros perros y activan también la convivencia entre sus dueños.
La nueva área da respuesta a las demandas expresadas por el vecindario de estos dos barrios a través de los Consejos de Zona para disponer de zonas de esparcimiento para sus animales de compañía. Para su ubicación, consensuada por los técnicos con los vecinos y vecinas, se buscó un espacio público amplio que pudiera albergarlo, que diera servicio a ambos barrios y que se encontrara alejado de las viviendas para evitar molestias.